Las bombas no dejan de sacudir Alepo, donde miles de personas inocentes luchan por sobrevivir al asedio en una situación cada vez más crítica.
Por eso, hemos puesto en marcha esta petición urgentepara exigir a las autoridades quepongan fin al asedio y permitan la entrada de ayuda humanitaria y médica de manera inmediata. Es urgente; los ataques se han intensificado y las personas heridas están muriendo porque conseguir medicinas o atención médica es una tarea casi imposible. Por no hablar del desafío de disponer de comida o agua potable en medio de una guerra que ya dura más de cinco años.
El fracaso del último acuerdo de alto el fuego en Siria produjo una feroz intensificación de los ataques en Alepo, donde la población civil agoniza entre las bombas y sin acceso a ayuda humanitaria.
De acuerdo con informes creíbles de activistas, residentes y de la prensa, el gobierno sirio estaría utilizando armas incendiarias, municiones de racimo prohibidas internacionalmente y bombas anti-búnker para atacar áreas civiles.
Los mensajes que Amnistía Internacional ha recibido de personas atrapadas en la ciudad hablan de aniquilación.
La lucha por el control de Alepo ha sometido a esta gobernación y a la ciudad del mismo nombre a un implacable bombardeo, del que no escapan escuelas, edificios residenciales, hospitales, centros médicos… El gobierno sirio y su aliada Rusia están utilizando la fuerza aérea para causar sufrimiento de forma premeditada a la población civil. Todo vale dentro de la estrategia militar para vaciar las ciudades y los pueblos con el fin de allanar el camino para que avancen las fuerzas terrestres.
La estrategia también contempla cercar las partes de la ciudad que no están bajo su control para impedir el acceso de la ayuda humanitaria y médica. Las personas heridas se mueren debido a la escasez de personal médico, de equipamientos y medicinas y a la escasez de hospitales en funcionamiento. Conseguir comida y agua potable en medio de los bombardeos se convierte en el desafío cotidiano para miles de personas.
Siria y Rusia deben poner fin a los ataques ilegales en Alepo y permitir el paso de ayuda humanitaria.